La principal causa de dolor en la población de manera no traumática es la Artrosis, siendo esta
la principal causa de atención médica en ortopedia.
Pero, Qué es la artrosis?
La artrosis es una enfermedad degenerativa que afecta a las articulaciones. Se caracteriza por el desgaste y deterioro del cartílago, el tejido que recubre los extremos de los huesos en las articulaciones. A medida que el cartílago se desgasta, los huesos pueden rozar entre sí, lo que provoca dolor, inflamación, rigidez y limitación de movimiento en la articulación afectada.
La artrosis puede afectar a cualquier articulación del cuerpo, pero es más común en las rodillas, caderas, y de ahí a las demás articulaciones como manos, columna vertebral y articulaciones de los dedos. Las causas de la artrosis pueden ser diversas, incluyendo el envejecimiento, lesiones articulares previas, obesidad, predisposición genética, deformidades articulares y actividades laborales o deportivas repetitivas.
Los síntomas de la artrosis pueden variar en intensidad y frecuencia. Algunas personas pueden experimentar dolor y rigidez leve, mientras que otras pueden tener dolor crónico y limitación significativa en su capacidad para realizar actividades diarias.
El diagnóstico de la artrosis se basa en los síntomas del paciente, el examen físico y en estudios de imagen, como radiografías o resonancias magnéticas.
El tratamiento de la artrosis incluye medidas no farmacológicas, como terapia física, ejercicios de fortalecimiento, cambios en el estilo de vida (como perder peso si es necesario) y uso de dispositivos de apoyo, como férulas o bastones.
Las Medidas farmacológicas son: analgésicos, antiinflamatorios no esteroides y medicamentos condroprotectores que pueden ayudar a aliviar los síntomas y retrasar la progresión de la enfermedad.
En casos más graves, cuando el tratamiento conservador no es suficiente, se pueden considerar opciones quirúrgicas, como la artroscopia y limpieza articular, las Condroplastia (transplante de cartílago) y la artroplastia total de la articulación afectada (prótesis), donde se reemplaza la articulación dañada por una prótesis.
Es importante destacar que cada caso de artrosis es único y el tratamiento debe ser individualizado. Por ello, es fundamental acudir a una consulta médica por un especialista en ortopedia para recibir un diagnóstico y plan de tratamiento adecuado.
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